Serie: Westbrook Elite - Cambria Hebert

 #1

Tomar decisiones de las que me arrepiento es básicamente un pasatiempo.
Así que supongo que realmente no fue tan sorprendente cuando salí en una cita con un Elite.
Y luego trató de agredirme.
Puedo ser pequeño, pero no soy manso. Luché contra él... luego fui directamente al decano.
Él no me creyó. Nadie hace.
Y ahora mi cita del infierno está en modo venganza, y de alguna manera termino en la piscina del campus.
¿Mencioné que no puedo nadar?
Por suerte para mí, un caballero de brillante armadura me salva de ahogarme.
Excepto que no lleva una armadura brillante. Él está desnudo.
Y también es Élite.
En serio, ¿qué pasa con estos nadadores de élite?
Por supuesto, no tengo ninguna intención de volver a ver a su muy bien parecido y desnudo alteza.
Obviamente, no se puede confiar en Elite.
Hasta que me envuelve en su sudadera con capucha y promete creerme.
Ahora me estoy ahogando de nuevo, pero esta vez en sus enigmáticos ojos cobalto y su toque adictivo.
Mi único oxígeno es él. Creo que tal vez podría enamorarme.
¿Pero cumplirá su promesa cuando le diga la verdad sobre su compañero de equipo?
¿O confiarle a Ryan mi corazón y mi vida será solo otra decisión de la que arrepentirme?

#2

¿Alguna vez has sentido que te están observando?
Es una conciencia tan familiar que me adapté a ella hace mucho tiempo.
Luego me matriculé en la Universidad de Westbrook para perseguir mi sueño
y compensar el perdido por otra persona.
Los ojos curiosos que había conocido casi desde que nací...
Se cerraron.
Aun así, nunca me acerqué demasiado.
Me hice amigo de todos pero no confié en nadie.
Mis citas fueron elegidas cuidadosamente,
lo que significa que salía con chicos que realmente no me gustaban.
Y luego fui atacado.
Dormí en la cama de Jamie mientras él permanecía cerca de mí en el suelo.
Me dio su número y me dijo que llamara.
Ah, quería llamar. Pero no lo hice.
Ahora han regresado esos ojos invisibles y observadores que siempre me parecieron familiares.
¿Pero esta vez? Me congelan hasta los huesos.
Alguien está mirando. Alfombrilla de ratón.
Y es sólo cuestión de tiempo hasta que quienquiera que esté ahí fuera haga algo más que mirar.
El único lugar donde me siento realmente seguro es envuelto en la enorme envergadura de un nadador de élite.
El mismo hombre que sé que necesito evitar.
Pero a medida que la situación va bajando, queda claro que voy a tener que entregar algo...
Mi corazón o mi vida.